El Lean Startup es la aplicación del pensamiento Lean (pensamiento ágil) al proceso de creación y gestión de la innovación. Este proceso consta de varios elementos clave fundamentales para su finalización como, por ejemplo, la eliminación de todos los procesos que supongan un desperdicio, la comunicación efectiva con clientes, el predominio del colectivo sobre el individuo y la iteración rápida, entre otros.

Asimismo, el Lean Startup es también es un enfoque metodológico para la gestión de proyectos empresariales en etapas iniciales que integra los principios y herramientas de los mejores métodos de gestión emprendedora: el desarrollo de clientes, Business Model Canvas, Agile Development y elementos Lean introducidos por Toyota.

Empleando estas metodologías de Agile Development en iteraciones rápidas, activamos un proceso basado en tres fases definidas: construir (un producto o proyecto poniendo en marcha una serie de ideas establecidas previamente), medir (elaborando y utilizando métricas para extraer datos del impacto de ese producto o proyecto) y aprender del proceso en sí. Mediante este procedimiento lograremos un producto o proyecto Mínimo Viable que sea rápido (de ciclos cortos), barato (que no conlleve gastos) y que sea de métricas interpretables.

Como resultado, este proceso nos adapta a un contexto de innovación continua basada en desarrollo iterativo y aprendizaje validado.